La integración sensorial

La integración sensorial es un proceso neurológico que permite al cerebro organizar e interpretar la información que recibe a través de los sentidos (vista, oído, tacto, gusto, olfato, movimiento y gravedad). Este proceso es fundamental para interactuar de manera efectiva con el entorno y desarrollar habilidades motoras, cognitivas y emocionales.

Componentes clave de la integración sensorial:

Recepción sensorial: Los sentidos captan estímulos del entorno.

Procesamiento sensorial: El cerebro organiza e interpreta la información recibida.

Respuesta adaptativa: La persona genera una respuesta adecuada a los estímulos.

Importancia de la integración sensorial:

  • Facilita el aprendizaje y la atención.
  • Permite el desarrollo de habilidades motoras finas y gruesas.
  • Ayuda a regular las emociones y el comportamiento.
  • Es esencial para la coordinación y el equilibrio.

Trastornos  más conocidos de la integración sensorial:

Cuando este proceso no funciona correctamente, pueden surgir dificultades conocidas como Trastorno del Procesamiento Sensorial (TPS). Algunos síntomas incluyen:

  • Hipersensibilidad
  • Hiposensibilidad a estímulos (por ejemplo, molestia con ruidos fuertes o falta de respuesta al dolor).
  • Dificultades de coordinación y equilibrio.
  • Problemas para concentrarse o aprender.
  • Comportamientos inusuales, como evitar ciertas texturas o movimientos.

Terapia de integración sensorial:

La terapia de integración sensorial, desarrollada por la terapeuta ocupacional Jean Ayres, es un enfoque utilizado para ayudar a personas con TPS. Incluye actividades que estimulan los sentidos de manera controlada, como:

  • Juegos con texturas, sonidos y movimientos.
  • Ejercicios de equilibrio y coordinación.
  • Uso de herramientas como columpios, pelotas terapéuticas o trampolines.

Esta terapia es especialmente modo general y otras patologías útil para niños con autismo, TDAH o dificultades de aprendizaje, aunque también puede beneficiar a adultos con problemas sensoriales.

Si sospechas que tú o alguien más tiene dificultades de integración sensorial, es recomendable consultar a un terapeuta ocupacional especializado.